Moviendo al Ejército

miércoles, 13 de mayo de 2009

Usar la Situación

Sun-tzu dijo:

En general, cuando se establece el campamento del ejército y se estima al enemigo, se debe pasar rápidamente por las montañas siguiendo los valles. Se debe acampar en lugares altos, de frente al Sol. No se debe escalar las alturas pitra combatir. Eso en cuanto a la guerra en la montaña. Después de cruzar un río, hay que alejarse de él. Cuando una fuerza invasora cruza un río en su avance, nunca hay que encontrarla en el medio de la corriente. Es mejor dejar que la mitad del ejército cruce, y entonces librar el ataque. Si se está ansioso por combatir, no se debe ir al encuentro del invasor cerca de un río que éste deba cruzar. Se deben amarrar las embarcaciones más alto que las del enemigo y de frente al Sol. No hay que moverse corriente arriba para encontrar al enemigo. Esto en cuanto a la guerra en el río. Al cruzar panlanos salados, el único cuidado debe ser salir de ellos rápidamente. Si se esta forzado a combatir en un pantano salado, hay que tener agua y pastos cerca y tener las espaldas hacia una arboleda. Esto en cuanto a las operaciones en pantanos salados. En terreno seco y nivelado, se debe tomar una posición fácilmente accesible, con el terreno elevándose hacia la derecha y hacia atrás, de manera que el peligro esté en el frente y haya seguridad atrás. Esto en cuanto a acampar en terreno llano. Estas son cuatro ramas útiles del conocimiento militar. Le permitieron al Emperador Amarillo obtener excelencia entre los soberanos. Todos los ejércitos prefieren el terreno alto al bajo, los lugares soleados a los oscuros. Si se cuida a los hombres y se acampa en terreno duro, el ejército estará libre de enfermedades y esto asegúrala la victoria. Cuando se llega a una colina o a una orilla, se debe ocupar el lado soleado, con la ladera en la retaguardia derecha. De esta forma, simultáneamente se actúa en beneficio de los soldados y se utilizan las ventajas naturales del terreno. Cuando, como consecuencia de lluvias fuertes, un río está crecido y cubierto de espuma, hay que esperar hasta que baje para cruzarlo. Un camino en el que hay torrentes que corren entre acantilados, hondonadas naturales profundas, lugares confinados, malezas enmarañadas, cenagales y zanjones, debe ser abandonado a toda velocidad, y no hay que acercarse a él. Al apartarse de esos lugares, hay que lograr que el enemigo se aproxime a ellos; al enfrentarlos, hay que lograr que el enemigo los tenga en su retaguardia.

Determinado la Vulnerabilidad del Oponente

Si en las vecindades del campamento propio hubiera pasos estratégicos, lagunas rodeadas de pastos acuáticos, estanques y depresiones llenos de cañas, o bosques de montaña con sotobosque espeso, se los debe examinar repetida y cuidadosamente; estos son lugares donde el adversario puede preparar emboscadas o albergar espías. Cuando el enemigo está cerca y permanece quieto, es que está contando con la fuerza natural de su posición. Cuando se mantiene retirado y trata de provocar una batalla, es que está ansioso para que el otro bando avance. Si el lugar de su campamento es de fácil acceso, está tendiendo una carnada. Movimiento entre los árboles de un bosque muestra que el enemigo está avanzando. La aparición de parapetos en medio de un pasto espeso significa que el enemigo está dudando. Si los pájaros levantan vuelo es señal de una emboscada. Animales sobresaltados indican que se aproxima un ataque súbito. Cuando el polvo se levanta en forma de columna alta es señal de que hay carros avanzando. Cuando el polvo es bajo pero se extiende sobre un área amplia, muestra que se acerca la infantería. Cuando se abre en varias direcciones. muestra que han sido enviadas partidas a juntar leña. Unas pocas nubes de polvo moviéndose de aquí allá significa que el ejército está acampando. Palabras humildes y un incremento en las preparaciones son señales de que el enemigo está por avanzar. Lenguaje violento y dirigirse hacia adelante como para atacar son signos de que se retirará. Cuando los carros ligeros salen primero y toman una posición en los flancos, es señal de que el enemigo está formando para la batalla. Propuestas de paz que no están acompañadas por un convenio jurado indican un complot. Cuando hay movimientos apresurados es señal de que ha llegado el momento crítico. Cuando algunos avanzan y otros retroceden, el enemigo está intentando incitar.

Determinando la Vulnerabilidad del Oponente

lunes, 11 de mayo de 2009

Cuando los soldados están de pie apoyados en sus lanzas, están hambrientos. Si quienes son enviados a buscar agua comienzan bebiendo ellos mismos, el ejercito sube de sed. Si el enemigo ve una batalla que puede ganarse y no se esfuerza en asegurarla, los soldados están exhaustos. Si los pájaros se juntan en un punto, quiere decir que no está ocupado. Clamor por la noche indica nerviosismo. Si hay disturbios en el campo, la autoridad del general es débil. Si los estandartes y banderas son cambiados de lugar, se aproxima una sedición. Si los oficiales están con ira, significa que los hombres están cansados. Cuando el ejército alimenta a los caballos con granos y mata a su ganado para comer. y cuando los hombres cuelgan sus utensilios de cocina, mostrando que no regresarán a sus tiendas, se trata de un invasor exhausto. Hombres susurrando ¡untos en pequeños grupos o hablando en tonos bajos, muestra insatisfacción entre los rangos y las filas. Recompensas demasiado frecuentes significa que el enemigo está llegando al fin de sus recursos. Demasiados castigos muestran una situación desesperada. Ataques que primero son feroces y después temerosos muestran falta de inteligencia. Cuando el enemigo envía mensajes con muchas lisonjas, significa que desea una tregua. Si las tropas del enemigo marchan enojadas y permanecen frente a las nuestras por mucho tiempo sin trabarse en batalla ni retirándose, se trata de una situación que requiere gran vigilancia y circunspección. Si las tropas propias no son mayores en número que las del enemigo, significa que no se puede hacer un ataque directo. Se deben concentrar toda las fuerzas disponibles, mantenerse vigilando estrechamente al enemigo, y capturarlo. Quien no piensa de antemano, sino que toma a su enemigo a la ligera y no hace suficientes cálculos previos, con seguridad será capturado por éste.

El Cultivo de las Relaciones

Si los soldados no están fuertemente acometidos, no obedecerán cuando sean castigados; si se los emplea cuando no obedecen, habrá problemas. Si cuando los soldados están fuertemente acometidos no se les imponen castigos, emplearlos también será inútil. Por lo tanto, los soldados tienen que ser tratados con humanidad, pero mantenidos bajo control por medio de una disciplina de hierro. Este es el camino seguro hacia la victoria. Si al entrenar soldados las órdenes son claras, el ejército será obediente. Si al entrenar soldados las órdenes no son claras, el ejército no será obediente. Si un general muestra confianza en sus hombres y sus órdenes siempre se cumplen, el éxito será para todos.

Posiciones en el Terreno

Las Seis Posiciones

Sun-tzu dijo: En las posiciones en el terreno tenemos: Terreno Accesible, Terreno Enmarañado, Terreno Indeciso, Terreno Estrecho, Terreno Obstruido, Terreno Distante. El terreno que se puede atravesar libremente por ambos lados se llama Terreno Accesible. En Terreno Accesible se deben ocupar los puntos elevados y soleados antes que el enemigo, y guardar cuidadosamente la línea de suministros. Entonces se será capaz de combatir con ventaja. El terreno que se puede abandonar pero es complicado para reocuparlo se llama Terreno Enmarañado. En Terreno Enmarañado, si el enemigo no está preparado, se puede salir y derrotarlo. Pero si el enemigo está preparado para el ataque y no se lo puede derrotar, entonces retornar es imposible y residíala un desastre. Cuando la posición es tal que ninguno de los bandos obtendrá ganancia en hacer el primer movimiento, se llama Terreno Indeciso. En Terreno Indeciso, aunque el enemigo ofrezca una carnada tentadora, es aconsejable no avanzar sino retirarse. de esta forma se lo incita al enemigo; entonces, cuando parte de su ejército ha salido, se puede librar un ataque con ventaja. En cuanto a los Pasos Estrechos, si se los puede ocupar primero, deben estar fuertemente guarecidos y esperar la llegada del enemigo. Si el ejército enemigo los ocupara primero, no se lo debe perseguir si está completamente guarecido; sólo se lo puede hacer si está poco guarecido. En cuanto al Terreno Obstruido, se debe ser el primero en ocupar los lugares altos y soleados, y ya allí esperar al adversario. Si el enemigo los ha ocupado primero, no se lo debe seguir, sino retirarse y tratar de incitarlo a salir de ahí. Si se está situado a gran distancia del enemigo, y la fuerza de ambos ejércitos es igual, no es fácil provocar una batalla: combatir será desventajoso. Estos seis principios están conectados con la Tierra. El general que ha alcanzado un puesto responsable debe tener el cuidado de estudiarlos.

Los Seis Errores Estratégicos

Huiré las Estrategias: Está la huida, está la insubordinación, está el derrumbe, está la ruina, está el desorden, está la deserción. Estas seis calamidades severas no surgen de las causas naturales, sino de faltas de las que es responsable el general. Cuando las otras condiciones están igualadas, si una fuerza es lanzada contra otra diez veces su tamaño, el resultado será la huida de la primera. Cuando los soldados son demasiado fuertes y sus oficiales demasiado débiles, el resultado es la insubordinación. Cuando los oficiales son demasiado fuertes y los soldados comunes demasiado débiles, el resultado es el derrumbe. Cuando los oficiales superiores están enojados e insubordinados, y al encontrarse con el enemigo dan batalla por cuenta propia por un sentimiento de resentimiento, antes de que el comandante en jefe pueda decir si está o no en posición de combatir, el resultado es la ruina. Cuando el general es débil y sin autoridad; cuando sus órdenes no son claras y nítidas; cuando no hay deberes fijos asignados a los oficiales y los hombres, y los rangos están formados de manera azarosa, el resultado es el desorden total. Cuando el general, incapaz de estimar la fuerza del enemigo, permite que una fuerza inferior se trabe con una superior, o lanza un destacamento débil contra uno poderoso, y descuida el ubicar soldados de élite al frente del rango, el resultado será la deserción. Estas son cinco formas de cortejar la derrota; deben ser notadas cuidadosamente por el general.

Liderazgo Superior

La formación natural del campo es una ayuda para la estrategia. El poder de estimar al adversario con sus probabilidades de vencer, y calcular la distancia y cercanía de los peligros. constituyen las características del general que sigue el Tao. Quien conoce estas cosas y al combatir pone su conocimiento en práctica, ganará sus batallas. Quien no las conoce ni las practica, con seguridad será vencido. Si el Tao de la Estrategia indica que el combate resultará en victoria, entonces se debe combatir aun si el gobernante lo prohibe. Si el Tao de la Estrategia indica que el combate no resultará en victoria, entonces no se debe combatir aunque el gobernante lo pida. El general que avanza sin codiciar la fama y se retira sin temer la desgracia, cuyo solo pensamiento es proteger a su país y dar un buen servicio a su soberano, es la joya del reino.

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